Desde la Iglesia, Una ventana a otra realidad

Una ventana a otra realidad

 

Vivir en un país en donde diariamente 12 personas pierden la vida de forma violenta, parece ser una misión imposible. Como si eso fuera el único problema, agreguemos el desempleo y la falta de oportunidades a servicios como educación, médica y alimentaria. Con sólo ese panorama, cualquier persona perdería las esperanzas, sueños y visión al futuro.

Pero ¿Cuál es el sector de la población más vulnerable ante este contexto desalentador? Sin lugar a dudas la respuesta es un secreto a voces. Las niñas, niños, jóvenes y señoritas se vuelven en el segmento más sensible ante esta problemática. Una pregunta resuena golpeando tácitamente en el vacío, ¿Quién debe velar por ellos?

En este sentido, Compassion International lleva 40 años trabajando en El Salvador a través de las Iglesias Evangélicas, convirtiéndose en la voz de los que no tienen voz, convirtiéndose en el defensor de la niñez en las comunidades más vulnerables y sobre todo, alimentando los corazones y creando de esta forma sueños y visión para el futuro.

Abrir oportunidades suena una tarea difícil y hasta cierto punto, imposible pero, eso es exactamente lo que Compassion International El Salvador está realizando a través de la iglesia evangélica en cada comunidad. Se sabe que los niños y jóvenes solo necesitan una oportunidad para brillar aun en aquellas comunidades consideradas como “Altamente Violentas”.

Alimentar sueños y abrir oportunidades en áreas como el deporte, talleres vocacionales y arte, se ha vuelto en una tarea continua de este ministerio. Actualmente cuenta con todo una “Estrategia de Desarrollo del Joven”, «Estrategia de Deporte»  y «emprendimientos»,  todos esos esfuerzos, buscan preparar a los jóvenes para cambiar sus contextos y sobre todo sus futuros.

En el área de las artes y música, se cuenta desde el 2012 con una “Orquesta Sinfónica Juvenil” conformada por 100 jóvenes y niños de diferentes colonias “Populosas” de nuestro país. Provenientes de Majucla, Soyapango, San Martin y muchas otras más. Los integrantes se reúnen bajo un mismo techo, unidos compartiendo sueños y oportunidades.  El Palacio Nacional de San Salvador, Teatro Presidente, Teatro Nacional de Santa Ana y otros lugares históricos, se han convertido en los escenarios en los que la “Orquesta Sinfónica Juvenil de Compassion” ha presentado grandes conciertos. Además, en el 2017 se aperturó una Orquesta Sinfónica en la zona oriental del país.

Ni la pobreza, ni la violencia, ni la falta de oportunidades ha detenido el caminar de sueños y esperanza de estos 100 músicos que ahora forman la Orquesta Sinfónica Juvenil de Compassion. Sin miedo día a día se encomiendan a Dios sabiendo que él tiene un futuro glorioso para ellos.

 

Fotografías y Texto por Dave Vásquez, Storyteller Collaborator